¿Permites que
hablen mal de otros a sus espaldas, en un grupo de personas donde tú estés? ¿Qué haces
cuando un trabajador viene a ti y te habla mal a espaldas del otro? ¿Sabes
diferenciar una queja, una crítica, una preocupación sana de un rumor, de un
chisme?
Si trabajas en el área de gestión de personas, es muy común, que muchos trabajadores se te acerquen y te hablen mal de sus jefes o simplemente de otras personas.
Hoy quiero compartir contigo, esas enseñanzas que he aprendido y que me sirvieron para pensar y actuar en esas situaciones tan incómodas, cuando hablan mal de tus colegas a sus espaldas.
Los tonos de esas conversaciones y las formas en que lo hacen, son muy
diversos. Algunas de esas conversaciones pueden ser muy útiles,
mientras que otras, se quedan en la
triste categoría de “Rumores o Chismes”, comentarios
negativos sin fundamentos, no verificados, llenos de veneno, mala intención o
exageración de las cosas.
Debes tener la habilidad de
diferenciarlas. Te enfrentas a una paradoja: ¿Lo escuchas o no?
Esa persona tal vez confió en ti y te ve como lo que eres, un asesor
dentro de la empresa o alguien en quien pueda desahogar sus preocupaciones.
Si no lo escuchas, si decides
cortar por lo sano y plantearle directamente que no te interesa conocer los
detalles de esas quejas, críticas o simplemente rumores, no te enteras de los
problemas que pudieran estar ocurriendo y pudieras estar perdiendo una
oportunidad de ayudar a mejorar a un colega o a un trabajador, en un
determinado comportamiento.
Por otra parte, si lo escuchas hasta el
final, corres el riesgo de estar escuchando rumores o mensajes faltos de
fundamentos y caer en la tentación de discutir o entrar en controversia con la
otra parte, o no actuar correctamente con esa información, o convertirte en el
multiplicador de esos rumores, aunque en el mejor de los casos, te permitiría
seguir indagando sobre posibles causas del comportamiento de algún jefe o
trabajador y a buscar vías para ayudarlos a mejorar.
Anécdota
Personal:
Hace unos cuantos años
atrás, participaba en un seminario taller, como parte de la tradicional
preparación mensual de directivos y reservas. Se llevó a debate y a discusión,
una parte de un documento titulado, “Los 20 errores de los directivos, cómo evitarlos”. Una parte solamente, porque la idea fue debatirlo en
5 sesiones de trabajo. Uno de los errores que aquel día se discutió con mayor
fuerza fue, el de “Promover
Chismorreos”.
Acababan de sustituir a
un directivo y entre las múltiples causas de su democión, figuraba un hecho
comprobado: su falta de
ética, al estar constantemente denigrando sin fundamentos, al
director general y a varios directivos a sus espaldas, delante de su propio equipo.
Todavía guardo algunos
apuntes de aquella fructífera reunión (“hábitos de viejos”, me decía mi padre a
menudo en tono jocoso, a mi manía de archivar cosas interesantes), que por
supuesto, los he engrosado a lo largo de varios años dirigiendo personas y observando
a otros, cómo lo hacen.
El debate cobró fuerza y
se concentró en dos grandes grupos de personas con estas características: los que hablan mal en cualquier lugar
de cualquier persona en tu presencia y los que van directamente a ti a
hablar mal, a plantearte preocupaciones,
sobre el comportamiento o desempeño de otras personas (generalmente críticas y
quejas y que no sabes aún, si son rumores, chismes o preocupaciones reales)
¿Qué hacer con los que hablan mal, en
cualquier lugar, de cualquier persona en tu presencia?
- Corta la conversación: Si en tu presencia y delante de otras personas, alguien habla mal de un jefe, colega, o colaborador o promueve chistes maliciosos, risas satíricas, burlas, trata de cortar la conversación y explicar tus motivos de por qué no es bueno ni saludable, hablar de otros a sus espaldas.
- Enfrenta firmemente a esa persona: De forma amable y sin groserías, sin amenazas, insta a esa persona a que pare de hablar de otros, porque choca con tus valores y va contra los valores de tu empresa. Pregúntale las razones que tiene para actuar de esa manera, si ha tenido algún problema con la persona de la que está hablando mal.
- No te hagas cómplice de su Chisme: No es correcto que vayas directamente a ver a la otra persona, a contarle que están hablando mal de él.
- Invítalo a que hable de forma privada con la persona de la que está hablando: Muéstrale las ventajas que tiene el hecho de que hable directamente con esa persona. Incluso, dile que tú lo acompañarás. Si se niega, públicamente estará reconociendo que es solo un chisme, una crítica destructiva, que no tiene el valor de enfrentar la situación, ni la intención de mejorar al otro. Si tiene vergüenza, tal vez se lo piense la próxima vez, antes de hablar de otros delante de ti.
Pero hay momentos en que debemos
escuchar a los trabajadores, por respeto y porque es parte de nuestra
profesión, como especialistas o como directivos de gestión de personas, a pesar de que no sabemos si lo que nos van a
trasladar son chismes, rumores o preocupaciones
reales sobre otras personas.
¿Qué hacer cuando vienen a ti y hablan
mal de otros?
- Busca un lugar adecuado para conversar: Por lo general vienen a tu oficina, pero hay personas que te abordan en un pasillo atestado de gente y quieren disparar en ráfagas, todo lo que tienen atragantado de sus jefes o de otras personas. Busca privacidad.
- Deja clara tu posición: al inicio de la conversación, le explicas que escucharlo no significa que estés de acuerdo con lo que vaya a decir esa persona: lo mejor siempre será, que hable o destile su problema, directamente con su jefe o con aquellas otras personas implicadas. En muchas ocasiones, cuando han sido preocupaciones legales, laborales o salariales, he tenido el privilegio de acompañarlos a discutir sus desavenencias, principalmente con sus jefes.
- Garantiza el anonimato de sus declaraciones: le garantizas no mencionar su nombre, pero dejas claro, que en algún momento hablarás con su jefe, para tratar de incidir en el cambio de comportamiento.
- No pierdas la calma durante la conversación: Mantén el autocontrol emocional. Es difícil, más aún, cuando detectas señales o indicios de que son infundadas las críticas (o por lo menos eso piensas en ese momento). Aunque no te agraden, trata de mantener el profesionalismo. Trata de distinguir los aspectos que son razonables, de aquellos que solo se lanzan tan solo para denigrar al otro y detectar en lo posible, si hay algo de verdad. "Cuando el río suena, es porque piedras trae".
- Aclara lo que puedas: la mayoría de los rumores que he enfrentado en el ámbito laboral, se deben a la falta de información, interpretación errónea de lo que está sucediendo o va a suceder, estilos inadecuados para manejar conflictos y por supuesto la raíz de todo este mal, es la mala comunicación entre jefes y colaboradores. Si es el caso y tienes argumentos claros y contundentes, no demores en mostrárselos.
- Da las gracias por la confianza y transmítele seguridad en las acciones futuras: Agradece la confianza depositada en ti y explícale que después de esa conversación, reunirás más información por diferentes vías, para verificar si es un hecho aislado o forma parte de un mal comportamiento generalizado. Además que tratarás de buscar una solución satisfactoria para todas las partes.
Evita hacer comentarios negativos de la gente, entrena a tu equipo en habilidades para relacionarse con personas tóxicas y no
permita que hablen de otros en tu presencia.
Promueve espacios participativos en tu empresa, donde las personas
puedan expresar sus preocupaciones, dudas, insatisfacciones. Esta práctica
elimina muchas fuentes de rumores negativos.
Recuerda que hablar mal de otros, habla
muy mal de ti.
Cierro este post, con una frase
de gran mujer del siglo XX, Eleonor Roosevelt, “Las grandes mentes hablan de ideas,
las mentes promedio hablan de sucesos y las mentes pequeñas hablan de los
demás.”
Si
te gustó el post, me gustaría que lo comentaras y compartieras en tus redes
sociales.
¿Qué
otras cosas haces, cuando hablan mal de otros en tu presencia?
Buenas tardes, a mí que me encanta el protocolo, y a la vez la sabiduría popular.
ReplyDeleteHay una frase de un amigo mío que me encanta, y El cual se autodenomina: "Yo es que soy de barrio...:)"
Cuando alguien se le acerca a contar un rumor, criticar a alguien, etc. Mi amigo, y muy sabiamente por cierto, siempre interpreta que le quieren utilizar no como confesor, sino como herramienta o complice de un acto, que ellos no se atreven a hacer de frente, y así conseguir que mi amigo hable con la persona criticada.
Y El dice contesta así: - Mierda, pa el "Corre, ve y dile"
Lo cual quiere decir popularmente, algo así cómo: "Te ignoro, a mi no me vengas a decir, que yo le diga a nadie nada".
Cómo mucho le ofrece irónicamente, el teléfono o email de la persona criticada, y si tiene valor, que se lo diga directamente...
Y a mi juicio, que razón tiene. Pues El que rumorea, generalmente intenta alabarnos, haciendonos ver que tiene nuestra confianza, pero lo que realmente quiere, es utilizarnos por su falta de entereza.
Hola Robert, Bienvenido al Blog!. Muchas gracias por tus acertados comentarios y por aportarnos esa sabiduría popular de la buena, al debate. Yo creo que tu amigo tiene mucha razón, que esas personas carecen de entereza para enfrentar los hechos, recuerda que no todas las personas tienen el valor para hecerlo por diferentes motivos.Lo que pasa es que cuando uno tiene la responsabilidad de escuchar a los trabajadores en una empresa, existe una delgada línea, tal vez muy fina, a la hora de decidir escuchar o parar al que trae una queja, un rumor y remitirlo directamente a la otra persona. Puede ser que nos utilice, que nos manipule, (yo realmente prefiero verlo de otra manera), pero mi experiencia como directivo me ha dicho que muchos rumores aunque sean mordaces, malintencionados, tienen una carga de veracidad que si no los atajamaos a tiempo se convierten en problemas mayores. He sido testigo de innumerables hechos de corrupción y desvío de recursos, que han sido atajados tempranamente y otros lamentablemente muy tarde, por el solo hecho de creer que son rumores y chismes. Te aseguro que hay m'etodos más maquiav'elicos aún, como es utilizar los Anónimos, como consecuencia de no saber escuchar en nuestras organizaciones. Saludos y te espero nuevamente acá, con esas miradas diferentes que tanto nos ayudan a entender temas complejos y cotidianos.
ReplyDeleteMe llevo para mi experticia. Muy bien.
ReplyDeleteHola Armando, Bienvenido al Blog!!!. Me alegra que este post te sirva para incrementar tu experticia. Saludos y te espero nuevamente por acá.
ReplyDeleteHola Juan Carlos,
ReplyDeleteEste tema me parece extremadamente importante en el contexto del clima laboral de una empresa. Me parece que la manera de enfrentar esta situación (no la calificaría de problema en primera instancia)es escuchando siempre lo que otro tiene para decirte, (de esa manera generas confianza) y luego sin nombrar a nadie puedes averiguar con otras fuentes la verdad o falsedad de la información. Una vez recopilado más información, hablar con la persona que trajo la información y plantearle directamente que lo que dice es una falsedad y que pare de decir transmitir ese tipo de informaciones y si es efectivo que los instas a hablar con el afectado directamente o que lo puedes acompañar a hacerlo para solucionar de una vez la situación.
Gracias Juan Carlos por esos temas interesantes que compartes con nostros.
saludos
Oscar
Hola Oscar, Bienvenido al Blog!!! Muchas Gracias por tus excelentes comentarios, constituyen valiosos consejos que complementan muy bien el sentido del Post. Me alegra que te resulte interesante el tema y desde ya, te invito a que sigas interactuando con nosotros, te espero nuevamente. Saludos
ReplyDeleteRealmente tocas muy importantes para el Manejo de Objeciones, solo agregaría otros más con respecto a susceptibilidades y moderación. Felicidades.
ReplyDeleteHola Pepe Ge, muchas gracias por tus comentarios y por tus aportes al debate, sin dudas muy útiles. Eres Bienvenido al Blog y te espero pronto en nuevos o anteriores artículos. Saludos y que tengas una feliz semana.
ReplyDeleteEn ocasiones sólo quieren deshagarse
ReplyDeleteQuizás otro punto de vista, que les ayude a relativizar la situación.
Hola Estrella, bienvenida al Blog!!! y muchas gracias por el aporte al debate. Tienes razón con lo que planteas, lo tendremos en cuenta. Muchas gracias y te espero nuevamente por acá. Saludos y que tengas un feliz lunes.
ReplyDeleteAl final se trata de aplicar la propia ventana de Johari y la asertividad. Conviene diferenciar muy bien el chit-chat y cotilleo, tan propio del ser humano y por ende de cualquier empresa, de la crítica veraz y constructiva sobre un hecho concreto. Los que siempre están criticando y reciben alianzas de compañeros similares siempre están en una cooperación destructiva.
ReplyDeleteTodo está en la esencia de cada uno de nosotros, y depende siempre de qué nos motiva pata actuar de una u otra forma; habitualmente los chismosos se mueven por envidia, pérdida de status o poder, ambición o dinero, y de todos esos móviles el principal es la envidia y problemas de autoestima.
Hola Fructuso Javier Rodríguez Barrionuevo, muchísimas por sus comentarios, que enriquecen el debate sobre este tema y enseñan mucho. Importante aclaración sobre saber diferenciar cotilleo de la crítica. Saludos, eres Bienvenido al Blog, te espero nuevamente por acá.
DeleteGracias, que buenos tips.
ReplyDeleteHola Amanda, muchas gracias por tus comentarios. Bienvenida al Blog!!!. Saludos
Delete