Hace poco leía en la revista Forbes, el artículo “10 razones por las que se odia a Recursos Humanos”,
que desde ya se lo recomiendo y me pareció interesante comentarte en este post,
sobre la primera razón, que allí se
expone.
Según la prestigiosa publicación norteamericana y con la ayuda de la
experta en Capital Humano Luz Ryan, fundadora de Human Workplace, se dice que
en primer lugar, RRHH es odiado, “porque “en
cualquier interacción, el personal
de recursos humanos parece estar siempre del lado de la
empresa y no de parte del empleado”.
Sigue leyendo y encontrarás algunas de las lecciones aprendidas, relacionadas con este tema.
Antes de empezar a darte mis consideraciones, me gustaría decirte que
no existe en el mundo una súper área de RRHH, donde todos a su alrededor, la
idolatren, como tampoco creo que sean tan malas, que se vayan a cumplir todas
las lecciones aprendidas que te comento más adelante.
Siempre van a existir inconformes,
(y para bien, creo yo) ya sea con alguna
práctica de RRHH en particular o con los
comportamientos de los propios integrantes de esta área.
Ahora, no me gustaría entrar en juegos de palabras, de que si la
empresa somos todos, incluidos los empleados.
Por lo general, esa primera razón que esgrimen en la revista, la
entiendo, como que RRHH se preocupa más
por agradar a los que toman decisiones
importantes en una empresa, que a los
propios empleados.
Por ahí va, mi debate en el día de hoy. Aclaro, que he ocupado
funciones de profesional de RRHH y de directivo en empresas, por lo tanto,
trataré de no parcializarme, sino más bien de exponer algunos puntos que
pudieran servir de base para mejorar nuestra vital área de RRHH y para que no
“nos odien tanto”.
Casi todos conocemos las obras de Dave Ulrich (a los más nuevos en RRHH
que estén leyendo este post, le recomiendo acercarse a este gurú de los RRHH) y
en una de ellas, nos explica de forma muy inteligente e innovadora, los 4 roles
que debemos asumir como profesionales de RRHH.
Los 4 roles son muy importantes y hay que saberlos balancear en nuestra
actividad diaria.
Precisamente uno de esos 4 roles que debemos potenciar, sería el de Defensor del empleado o Employee Advocate y es
el que guarda relación con el tema de hoy y donde muchas veces fallamos.
Te repito, son las percepciones que he podido captar a través de mi
experiencia y de lo que he aprendido de otros.
¿Por qué el personal de recursos humanos
parece estar siempre del lado de la empresa y no de parte del empleado?
- Porque RRHH no representa los intereses de los empleados.
- No se esfuerza en estar cerca de los trabajadores, de escucharlos, atenderlos y apoyarlos en sus necesidades profesionales y personales.
- Porque a pesar de que RRHH diseña e implementa encuestas de satisfacción del empleado, “no es capaz de empujar” iniciativas de cambio, en los principales problemas identificados.
- Porque no se asegura de que sus iniciativas o prácticas de gestión de personas, sean bien conocidas por los trabajadores, ni que incluyan recomendaciones de los mismos, ni que estén balanceadas o que sean coherentes entre sí.
- Porque se limita a cumplir al pie de la letra, las orientaciones de los directivos, aunque traigan consecuencias negativas para los empleados, sin adicionar criterios propios o propuestas de soluciones que pudieran minimizar sus efectos.
- Porque no implementa acciones que contribuyan a la mejora de la experiencia del empleado en la organización.
- Porque no es capaz de contribuir a generar una conexión emocional de los empleados con la empresa.
- Porque no es capaz de fomentar una cultura organizativa, que incluya políticas de reconocimiento que estimulen la implicación de los empleados, que les dé mayor protagonismo en la toma de decisiones y que potencie un liderazgo verdadero, donde los directivos se preocupen y se ocupen de sus colaboradores.
- Porque RRHH sigue manteniendo una innecesaria burocracia en todos sus procesos y no es capaz de generar entornos más ágiles, colaborativos, a través de herramientas digitales que propicien o le faciliten a los empleados, ejecutar sus actividades, en todo el ciclo de gestión de personas.
- Porque no contribuye a agregar valor a los empleados, asegurando su competencia, desarrollo y compromiso.
- Porque no ayuda al desarrollo de las capacidades de los empleados, muchas veces lo frena, con programas de formación no acordes a los intereses profesionales de los empleados o incluso, con la oposición abierta, a novedosos programas de desarrollo, por considerarlos caros o por otras causas.
- Porque los empleados no saben cómo manejar su promoción o su carrera dentro de la empresa, ni saben lo que deben hacer para lograrla.
- Porque RRHH se demora mucho (o no lo hace) en responder y proveer a los empleados con los recursos necesarios para incrementar su pertenencia, compromiso y lealtad.
- Porque se considera un intermediario ineficaz, entre las comisiones de sindicatos y la dirección de la empresa.
- Porque generalmente es más visto como portavoz de la dirección de la empresa, a la cual le brinda más apoyo en sus decisiones, que como escudo de los empleados.
- Porque no se asegura que los empleados reciban un trato justo, en la mayoría de los conflictos laborales que surgen.
- Porque muestran desinterés y falta de educación en su interacción con los empleados.
- Porque brindan escasa información, o muestran falta de cordialidad, delicadeza y amabilidad, en la explicación o desarrollo de alguna práctica de RRHH.
- Porque siempre están ocupados cuando los empleados vienen a traerles quejas, sugerencias o preocupaciones y sin embargo siempre están abiertos para atender a cualquier directivo, hasta en diligencias poco importantes.
- Porque se necesita ser más humanos en la gestión de personas, desde el área de recursos humanos y además, contribuir a que lo sean desde cualquier posición directiva.
- Porque etiquetan de conflictivos (y le hacen la vida un yogurt) a aquellos trabajadores que se arriesgan a romper con el statu quo y que critican lo mal hecho.
Son lecciones duras, las que te expuesto y no siempre aplican por igual
a todos, pero son señales que nos alertan, que debemos corregir el tiro, si de
verdad queremos que nuestros empleados no nos odien y sobre todo, que se
sientan como seres humanos y que puedan contribuir al éxito de la empresa.
Si te gustó el post, me ayudarías
compartiéndolo en tus redes sociales.
¿Crees que en tu empresa odian a RRHH?
¿Has podido detectar sus causas?
Comparte tus experiencias aquí y evita
que a otros les pase lo mismo.
No comments:
Post a Comment